En la fiesta de la vendimia todo el mundo esta muy elegante y alegre. Un hombre del equipo de trabajadores permanentes se retira por jubilacion y le han hecho regalos.
La cena ha sido delicadamente deliciosa. Champan con los canapes, vino blanco con el foie de pato,que se desacia en la boca llenandola de un suave sabor, aderezado con mermelada de frutas del bosque y soja impregnada en vino tinto.
Los tintos del Chateau de 1976 y 1981 magnificos, y probablemente los mejores vinos que beberemos en nuestra vida. La botella del 76 es de 73cl la otra normal de 75cl, Thomas Duroux nos ha explicado que ese era el tamaño tipico de la epoca. Es interesante pensar que un vino con mas años que Eric, no solo se conserva sino que ademas esta tan tan bueno, gracias a la tradicion y experiencia de mucha gente. La carne con verduras y pure de patata color berengena, tenia ademas una presentacion impecable, de cocina de autor. En realidad todos los platos eran agradables a la vista, ademas serlos para el olfato y el gusto. Quesos que mejoraban el vino aun mas si cabe, y una tarta sencilla pero especial, con capas de colores de chocolates y la ultima capa de chocolate crujiente.
Charlamos con todo el mundo, la niña de Onana ha venido, es riquisima, nos reimos mucho, y se respiraba una energia positiva en el ambiente, que es dificil de describir.
Ha sido una experiencia muy bonita, todo el mundo nos ofrece mucho cariño y nos desea lo mejor.
La cosecha que nosotros hemos recogido, nos dice Thomas Duroux, es excelente, supera al 2005 y se hablara de ella en los proximos años.