Lo importante no es llegar, sino ir.

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miércoles, 24 de junio de 2009

Tortum - Narman 55km 21-06-09

Hemos salido de Tortum a las 08:00 estaba nublado y fresco. Desayunamos por el camino, se nota que el clima humedo hace crecer las plantas medicinales que me son familiares, "cola de caballo", "llanten","milenrama","manzanilla" crecen por los prados.

Vamos poco a poco subiendo por una carretera con poco trafico atravesando pueblos donde las casas y pajares estan techados con chapa. Llegamos a lo alto del puerto de 2400m de altura disfrutando de un paisaje maravilloso, el agua es abundante en esta zona conocida como los valles Georgianos, rios y fuentes fluyen con fuerza.

Cuando culminamos el puerto encontramos una pareja turca con sus sobrinos. La jovencita habla frances y se nota que quiere hablar en este idioma, ha vivido hasta ahora en Bruselas y lo hecha de menos, su padre trabajaba en la embajada Turca, pero ahora van a vivir a Erzurum, ella no esta nada contenta con el cambio. Nos abrigamos para bajar, hay claros en los que brilla el sol.


Paramos a hablar con Talet, un abuelito que trabajo de joven en Hannover con el que Eric habla en aleman. Nos muestra las setas que ha recogido, segun nos dice la epoca de setas aqui es ahora en el mes de junio, le decimos que en Espania es en septiembre octubre y se asombra.

Cuando estamos llegando a Narman un grupo de hombres nos llaman, estan haciendo barbacoa y nos invitan a comer con ellos. Todo esta muy bueno, el pepino, el tomate, la cebolla, el pimiento, todo esta aderezado en platos independientes con diferentes especies. Las alitas de pollo estan bien pero el köfte esta delicioso, al final tambien preparan setas a la parrilla solo con sal, buenisimas jugosas y sabrosas, tambien nos dicen que es la epoca, y el çay que no falte, que aqui como son muy golosos, mantienen un terron de azucar entre los dientes mientras van bebiendo.
Vuelve a nublarse y amenaza tormenta. Nos despedimos y seguimos alucinando con la belleza natural de estos lugares.
Como empieza a llover y encontramos un lugar tan bonito y especial y no hay nadie mas que nosotros, decidimos montar la tienda y no pedalear bajo la lluvia, es temprano y el olor a tomillo lo impregna todo.

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