Isla de Krk - Isla de Rab 51km

Cuando a las 8:00 nos vamos a levantar Eric descubre que tiene en su pierna una garrapata, cosas que pasan cuando andas por los bosques salvajes. Intentamos ahogarla con aceite antes de tirar de ella con las pinzas de depilar, pero al final no tenemos la destreza de Celia, la enfermera de Taramundi que es toda una experta, y se queda dentro el aguijon, intentamos sacarlo con una aguja de coser, pero es con la punta de la navaja que me regalo Toquero con lo que sale todo.
Aprovechamos un claro donde brilla un poco el sol para desayunar y avanzamos hacia el sur de la isla. Es muy salvaje, todo bosque muy denso subir y subir. Estan arreglando la carretera, se nota que se preparan para el turismo de verano, ademas estan haciendo un carril bici que somos los primeros en usar hasta donde se puede, todos los obreros nos saludan y sonrien.


Comemos en Punat, una bajada a un bonito puerto de mar, una especie de empanada de queso "burek" que llena mucho y esta muy rica, el pan "kruh" cuesta menos de un euro y esta muy rico, mucho mejor que en Italia, de postre tomamos un pastel de manzana con canela que segun Eric es tipico de Austria.
En el puerto ademas de los barcos pesqueros y los de paseo de turistas, hay unos yates muy interesantes. Por supuesto los deportes acuaticos son estrellas en unas aguas transparentes como estas, buceo, esqui acuatico, windsurf. Junto a los pueblos que surjen del bosque, los olivos y las higueras dan fe de la mano del hombre en un paraje aun tan virgen. El turismo es fundamentalmente aleman e italiano. Por supuesto a nosotros nos siguen confundiendo con italianos. En la oficina de turismo Isabel una joven muy amable nos ha dado mucha informacion sobre los barcos horarios y mapas con alturas muy interesantes. Tenemos que retroceder para coger el unico barco de hoy a las 18:45 en Valbiska que nos llevara a la isla de Rab. En la oficina de turismo de Rijeka no nos informaron muy bien pero bueno asi hemos visto Punat y conocido a Isabel.


La capital Krk es un pueblo de calles empedradas con una iglesia que tiene una cupula con forma de cebolla.
No me sorprende que no encontremos ciclistas en este pais, porque es un verdadero rompepiernas.
Ya llevamos 3000km y seguimos hacia el este descubriendo lugares y gentes hermosas, que pese a las diferencias culturales y de lengua, una sonrisa amable nos une a todos.
Tenemos que esperar a que llegue el barco, las bicis pagan mas que nosotros, 36kn(bici) 31kn(adulto) asi que nos tomamos unas cervezas "pivo" en la espera.
Llegamos a Lopar de noche y vamos al autocamp San Marino que esta muy bien. Cocinamos spaguetis otra vez, hemos tardado mucho tiempo como si la gasolina de la cocina no tuviera suficiente fuerza.